viernes, 13 de marzo de 2009

Jueves Literarios - Óscar Zazo

JUEVES LITERARIOS

Encuentros amenos y distendidos donde no son necesarios ni orden del día ni turnos de palabra.

Extrañamente, nadie se interrumpe, ni lucha por hacer prevalecer criterios a base de levantar la voz; y lo que es mejor, no hay ningún fatuo, pesado o petulante que trate de lucirse monopolizando las reuniones.

Son espontáneas. Se puede disertar sobre teología, dar cuenta de un buen cocido o contar chistes ingeniosos para terminar, por inercia, hablando de libros, autores o tendencias.

Cada asistente aporta contenido literario, por que cada quien tiene un estilo, un criterio y una visión propia que en general enriquecen la charla

Recomendaciones o intercambios, lectura de cuentos, ensayos, fragmentos de novela, artículos, poesía de verso libre o de rigor métrico quevedesco. Lenguajes llanos o exquisitos, crudos o sublimes. Orgía de metáforas, bacanal de sarcasmos, resaca de desamores y lluvia de soledades.

Críticas lejos del elogio, nunca ofensivas ni desalentadoras. Sinceros reconocimientos. Matices, discrepancias, opiniones diversas, a veces convergentes, a veces encontradas. Siempre constructivas.

En el aire flota cierta bohemia. Se ve a la legua si alguien acaba de conseguir dinero por la vehemencia para querer invitar. Los ojos chispeantes y risueños delatan “los posibles”. En otras ocasiones, la repentina astenia de algún contertulio, también delata la ausencia del “vil metal”. Pero al final, nadie pasa sed.

No parece existir el pudor, ni para opinar, ni para permanecer en silencio, lo que permite practicar el bello arte de la oratoria y la exquisita virtud de escuchar.

Hay personas empeñadas en etiquetar a Sosúa como lugar de moralidad dudosa, pues bien hay otros ambientes; Y para mi ha constituido una insospechada paradoja y de paso un lujo que en este rincón del mundo exista un grupo de escritores que, en algunos casos derrochen como si nada vastos conocimientos literarios, en otros un innegable talento creativo y en no pocas ocasiones, conjuguen ambos alegremente.

Si la fortuna le sonriera a alguno de los miembros, la parcela de gloria que le corresponda será bienvenida por todos, pero mientras, seguiremos aprendiendo, creciendo y sobretodo disfrutando de compartir nuestra pasión. Los libros.